Traspié en Moreno frente a todo´s‏

El Mosca debió usar mucho de su astucia para ganar...

Por José "Pepe" Veiga.

28 de marzo (DRS).- La corta cancha de Biblioteca Mariano Moreno fue un duro escenario para nuestros Gastón Valle y Facundo Andreasen, no buscamos excusas, pero el marcador final, 25 - 17, nos indica una cifra que no refleja lo que fue el partido, pero si esta a tono de lo que realizaron los actores locales. El desarrollo nos otorga un rápido 7 a 4 a favor de los Riverplatenses, fue logrado gracias al ritmo impuesto por nuestros jóvenes representantes, la preocupación de Eduardo Torres (Mosca) hizo que escarbe en su arcón para vestirse con un mejor disfraz, logrando que su, prematuramente cansado, compañero Carlos Peralta (Tato) pueda oxigenarse tanto a tanto. Como logra esto, muy sencillo: una vez que obtuvo el saque, en cada tanto se dirigía el Mosca a su toallita colgada en la reja a la altura del 3 donde "secaba" sus problemas, luego del acto el protagonismo pasaba a su compañero Tato, quien poseía su botella y resina en el fondo, la escena total no duraba al menos de 1 minuto entre saque y saque, así sea local y visitante. Todos dirán: ¿y el árbitro...?, ahí estaba el tercer actor que faltaba en la obra, ya que el mismo hacía oídos sordos a los reclamos del técnico Héctor Góngora, de los jugadores y de la delegación Millonaria. El epilogo se lleva todos los "aplausos" para Tato, el mismo no recibió un saque ante el "va" de Gastón diciendo que no había pedido el saque, bajezas que poseen quienes recorren un largo camino en las canchas usándolas cuando no se debe y sin el respeto que merecieron quienes pase a pesar de la derrota jamás mostraron un gesto antideportivo ni del uso de muchas sutilezas. Lo bueno: la hidalguía de “Gasti” y “Facu” "dos SEÑORES deportistas", la malo: gestos imparciales del juez local. Una imagen: El Mosca en el vestuario tras el encuentro buscando recuperación en un frasco de polvos mágicos para "atletas".

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Club Atlético River Plate

Copyrigth © 2009 - DRS - Texto: José Veiga - Corrección: Nicolás Souto - Buenos Aires, 28 de marzo de 2009.